Evangelio de Hoy Jueves 09 de Mayo de 2024 | REFLEXIÓN | Red Catolica
Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.
Evangelio de Hoy Jueves 09 de Mayo de 2024
Eucaristía Digital
1- El cristianismo es el camino de la alegría.
2- Él desea venir y tomarnos de la mano, para sacarnos de la angustia.
3- Que el Señor nos libre de esta terrible trampa de ser cristianos sin esperanza, que viven como si el Señor no hubiera resucitado y nuestros problemas fueran el centro de la vida.
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Evangelio de hoy jueves nueve de mayo del dos mil veinticuatro
Proclamación del santo evangelio según San Juan A la hora de pasar de este mundo al padre Jesús dijo a sus discípulos Dentro de poco ya no me verán, y poco después me volverán a ver.
Entonces algunos de sus discípulos comentaban entre sí qué significa esto que nos dice Dentro de poco ya no me verán y poco después me volverán a ver ¿Y que significa yo me voy al padre?
Decían que es este poco de tiempo? No entendemos lo que quiere decir.
Jesús se dio cuenta de que deseaban interrogarlo, y les dijo: Ustedes se preguntan entre sí qué significa mis palabras, dentro de poco ya no me verán, y poco después me volverán a ver Les aseguro que ustedes van a llorar y se van a lamentar el mundo en cambio se alegrará Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.
Palabra del Señor Gloria T. Señor
Jesús Amados hermanos en Cristo, para desarrollar una pequeña reflexión de la palabra de Dios, y así podernos llevar una enseñanza nuestra vida, pongamos atención en los siguientes cuatro puntos.
En el primer momento de la meditemos en esta frase, no entendemos lo que quiere decir.
La intención de Jesús era que se dieran cuenta que iba a ser detenido en aquella noche, quería ser que todos ellos pusieran su mirada en la resurrección.
Esto era precisamente el significado cuando les decía que dentro de otro poco le volverían a ver.
Nosotros a veces nos hacemos los que no entendemos algo cuando no nos parece o no nos conviene o simplemente nos volvemos indiferentes ante lo que otro nos dicen y tratamos de engañar a los demás con nuestra actitud y nuestras palabras y gestos.
Pero al señor no lo podemos engañar. Él nos creó y conoce hasta lo más profundo de nuestros pensamientos.
Por eso no tiene sentido cerrar nuestros oídos y hacernos los sordos ante el mensaje del evangelio y todo lo que allí se nos encomienda.
Nosotros ya hemos escuchado los mensajes, las instrucciones y las recomendaciones del Señor.
No nos comportemos como los apóstoles que se confundieron ante la palabra de la cruz y el padecimiento de Cristo.
Nosotros ya hemos recibido el Espíritu Santo y hemos comprendido la sagrada escritura que escuchamos cada mañana y reflexionamos en torno a ella, sin embargo, poder existir la posibilidad de que ellos realmente hayan entendido sus palabras, Aún así, esto no se excluye de la responsabilidad de cumplir los mandamientos de Cristo.
En este segundo momento, profundicemos en el significado de la expresión Dentro de poco ya no me verán.
Este era un mensaje de esperanza que el maestro les estaba expresando.
Era la misma promesa que lo relacionaba con la resurrección.
Ellos ahora pronto verían a su maestro, pero luego él regresaría resucitado, con un cuerpo glorioso y con la corona de la resurrección.
Hay cosas que sólo las podemos entender a la luz de la fe y cosas que sólo podemos ver a través de la vida del espíritu.
Porque nuestra mente y ojos carnales solo ven lo terrenal y material, y por eso es que no avanzamos en la santidad ni damos pasos grandes de conversión.
Aun así, Dios nos envía al Divino Paráclito y Él nos abrirá el entendimiento y nos moverá para ir hacia el padre y nos dará los ojos espirituales para abrir las cosas del reino de los cielos.
Solo así podremos comprender el verdadero sentido del mensaje de salvación.
Puede que con nuestros ojos humanos, No veamos al Señor, pero desde los ojos de la fe no podemos ver delante de nosotros, hallando nuestro camino, y preparándonos para llegar a la meta que es el cielo.
Y estando allí ya lo veríamos cara a cara, Tal como los ángeles lo ven y lo contemplan.
Refuquillémonos en esta promesa, no perdamos de vista nunca la recompensa celestial.
Mientras estemos en esta vida, pidamos al paráclito que nos de la gracia de la fe para ver al señor en el rostro de los hermanos y la virtud de la obediencia.
Para cumplir los mandamientos de Cristo.
En el tercer punto de la reflexión meditemos esta frase, Ustedes van a llorar y se van a lamentar que el mundo en cambio se alegrará será una dura realidad la que les esperaba pero así debía ser porque formaba parte del plan de salvación, y ellos debían enfrentarlo.
Con esto Dios quiere que aprendamos que nuestra vida Él también nos permitirá pasar por momentos de pasión, pero que todo esto será necesario para ayudarnos a crecer en sabiduría y fortaleza.
Reconozcamos ya los momentos del pasado, nunca dudemos de que la voluntad del padre es perfecta, y que todo cuanto permites para nuestro alimento emocional y espiritual, la santidad y la vida en Dios no es algo que se adquiere si aprende de la noche a la mañana, Esto se construye poco a poco y para eso Dios está ayudándonos y mostrándonos el camino.
Él pasa transformando y cambiando aquello que no nos acerca a Dios y revelando lo que debemos hacer en cada momento de nuestras vidas.
Jesús les dice a los discípulos que él se va por un tiempo y que el mundo se alegrará, pero nosotros no debemos estar desanimados, porque ya Jesús demostró su poder en la resurrección, ahora estamos en los tiempos de Pascua donde debemos proclamar su salvación.
Ahora en el cuarto momento de la reflexión, meditemos en esta frase: Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo.
Jesús les dice un nuevo mensaje aún más contradictorio para ellos, ¿cómo sería posible que estando tristes?
Esa tristeza se convierta en alegría, pero ya comprendimos que ningún hijo de Dios está solo por el mundo, que tenemos la presencia del Espíritu Santo, quien transforma de manera inesperada nuestras amarguras en alegrías, nuestros malos hábitos, en virtudes.
El es el que nos santifica y nos permite ganarnos el cielo porque toda obra buena es impulsada por El y todo acto de amor que tengamos es movido por su fuerza.
Nuestra conversión puede pasar de uno a diez con la asistencia del espíritu, porque para Dios, nada es imposible.
Si confiamos de la acción del santo espíritu, No debemos dejar de orar por la conversión de nuestros familiares, de nuestros hijos o seres queridos.
Hoy puede que estén inmersos en el pecado, Pero mañana pueden ser más santos que nosotros los que ya estamos en el Señor.
La conversión es una obra de Dios y no nuestra.
Por eso, o comparemos las fuerzas del Señor con las nuestras ni pensemos que el tiempo de Dios es igual al nuestro.
Todo en el Señor es diferente, su reino no es como el reino terrenal.
En Dios todo es posible.
Por eso estemos atentos y vigilantes de que en cualquier momento Dios nos concede su bendición, la sanación que le pedimos, el favor que tanto necesitamos, pero debemos permanecer en oración y en obediencia a su palabra.
Finalmente concluyamos diciendo que Jesús es el gran maestro que nos habla en un lenguaje divino y que sólo la obra del espíritu hará que comprendamos su palabra y nos aferremos a ella.
Ahora con ayuda de las siguientes preguntas analicemos nuestro corazón para llevarnos un aprendizaje a nuestra vida.
¿Cuáles son las cosas que no he podido comprender? ¿Tengo ojos espirituales para ver las obras de Dios?
La resurrección de Cristo me llena de de valor para seguir en su camino?
Confío en la acción del Espíritu Santo para transformar mi realidad, ¡Oremos!
Dios santo, abrimos nuestros ojos para que con la luz de tu espíritu sean aclarados y podamos ver la presencia de tu hijo a través de todo lo que nos rodea, purifica nuestro entendimiento para lograr comprender las palabras del Salvador y todas sus enseñanzas.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo que vive y reina contigo en unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos amen, que el Señor te bendiga abundantemente en este día en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Si esa reflexión te ha gustado, recuerda dar like.
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