Milagros de los errores | Joel Osteen
Cuando cometemos errores, Dios no nos abandona. El Salmo 37:23-24 nos dice: «El Señor dirige los pasos de los justos; se deleita en cada detalle de su vida. Aunque tropiecen, nunca caerán, porque el Señor los sostiene de la mano».
Ningún error jamás podrá cancelar el plan de Dios para tu vida. Permite que Joel te muestre que ahora es el momento para creer de nuevo este mensaje. No importa lo que hayas hecho, si te puedes sacudir la culpa y logras seguir avanzando en tus pensamientos y expectativas, Dios te hará llegar a tu destino final y no será un lugar reducido sino el que Él destinó como el mejor para tu vida.
Dios le bendiga.
Gracias por permitirnos llegar hasta su hogar.
Se llena en nuestra área, por favor venga y participe en uno de nuestros servicios.
Esta es la mejor gente en todo Houston, Texas. Está aquí en Lakewood.
Nos encantaría que usted viniera, pero muchas gracias por sintonizarnos. ¿Cómo es empezar con algo gracioso?
A mí una vez un ministro anciano, estaba por morir, pido que dos de sus miembros, un empleado tributario y un abogado viniera a su casa, al llegar, esos señas de que se sentaran cada lado la cama.
Los hombres estaban muy conmovidos por estar seca con él en sus últimos momentos.
En un punto, el abogado dijo, con sinceridad, señor, ¿por qué no se escogió a nosotros?
El ministro hizo acopio de fuerza y dijo Jesús murió entre dos pecadores, y así quiero partir yo también.
Diga con convicción, esta es mi Biblia, soy lo que dice que soy, tengo lo que dice que tengo, puedo hacer lo que dice que puedo hacer.
Hoy recibiré la palabra de Dios, confieso hoy, que mi mente está alerta, mi corazón está receptivo, nunca más seré igual en el nombre de Jesús.
Dios le bendiga, Yo quiero hablar hoy de extraer milagros de los errores Todos hemos hecho elecciones equivocadas Y cosas que sabíamos que no eran lo mejor Y una cosa es cuando otras personas nos dañen, tuvimos una adversidad, no fue nuestra culpa, podemos tener fe que Dios lo restaurará, él nos recompensará, pero cuando nos acarreamos el problema nosotros mismos, cuando lo arruinamos es fácil vivir con remordimiento, pensando que Dios ya no va a ayudarnos, hicimos un desastre.
Pero aquí está lo bello. Dios sabía que usted lo arruinaría antes que él lo llamara.
Sabía que nos desviaríamos del camino.
A veces cederíamos a la tentación, no basó los planes que tenía para su vida contando con que tomaría decisiones perfectas, Dios tiene un plan incluso para sus errores.
Lo que usted considera un fracaso, lo arruinó. Nada bueno puede salir de eso.
Dios tiene una forma de extraer milagros de los errores y puede tomar lo que debió dejarlo solitario es solucionado lo que debió limitar su carrera, en vez de obstaculizarlo, Dios sabe como darle la vuelta y prepararlo para que avance así su destino, Pero muy seguido cuando cometemos errores nos sentimos muy abatidos culpables y sin esperar nada bueno Vos se nos dicen qué mal Vi hoy ahora con las consecuencias.
Todo será cuesta abajo. Pero cobre ánimos. Dios está lleno de misericordia.
No da la espalda cuando cometemos errores.
No dice, ya me cansaste, no lo acabarás bien, justo lo opuesto, él corre hacia nosotros, Él no solo le ayudará a limpiar el desastre que hizo, lo llevará un paso más allá y extraer a Milagros de sus errores.
Pablo lo dijo así Todas las cosas obran para bien Para quienes aman al Señor Todas las cosas incluyen nuestros errores las veces que lo arruinamos, nos desviamos, dios sabe cómo hacer que obra para nuestro bien.
Y quizá usted esté en una situación complicada, un problema que pareciera que nunca se resolverá.
Hay otra gente involucrada, diferentes personalidades, circunstancias legales. Parece demasiado complejo. Pero Dios lo tiene, todo solucionado.
Él puede ver cosas que usted no puede. Sus caminos son mejores que los suyos.
Quizás se cargó el problema usted mismo, dios está diciendo, yo voy a corregir esas complicaciones voy a resolver asuntos complicados.
Voy a solucionar cosas que nunca podrías haber resuelto por ti mismo. Fue lo que hizo por Abraham.
En la escritura, Dios le dio la promesa que él y su esposa Sara iban a tener un bebé, año tres años pasó, nada sucedió.
Ellos decidían tratar de ayudar a Dios. Sara le dijo a Abraham, que durmiera con su sierra, agarró.
Él lo hizo y tuvieron un bebé varón al que llamaron Ismael.
Están muy emocionados agradeciéndole a Dios la promesa, pero Ismael no era el hijo prometido, sin faltarles el respeto, Ismael fue un error, nació de la impaciencia de Abraham y Sara.
Ellos se precipitaron, tomaron el asunto en sus propias manos y tuvieron ese bebé, y bueno, hubo conflictos y visión en su hogar.
Sara estaba molesta con Abraham diciendo, ¿pero qué estabas pensando al dormir con mi sierra?
Le dijo ¿qué quieres decir? Tú eres quien me dijo que lo hiciera.
Respondido, no, no me diste haber escuchado, tuviste haber sabido.
Cada vez que Sara ve y haga, se ponía más y más enojada Finalmente le dio a Abraham un ultimátum, o esta señora y su hijo se van, o me oyo.
No me quedo en casa con esta mujer. Abraham estaba en una situación complicada.
Dos mujeres enojada con él. Estaba tratando de complacer a ambas.
Litaba la intervención divina, estaba en una cruzejada, tenía que enviar lejos a su hijo hacia el desierto, parecía que ese sería el fin de Ismael.
El problema era que amaba a Ismael, era su hijo, estaba conflictuado, pensando, amo a Sara y amo Ismael, ¿cómo fui a meterme en este lío?
Dios pudo decir Abraham, si me hubieras escuchado, no tendrías ustedes hasta, debiste espera, debiste ser más paciente.
Fue tu propia culpa. En cambio, Dios les dijo de hecho, sí Abraham es complicado, sí, es disfuncional, hay conflicto y división.
Pero no te habría dejado que te metieras en ese desastre, si no supiera cómo sacarte de este desastre.
Dios le dijo a Abraham, voy a hacer salir de tu hijo Ismael una gran nación.
Voy a multiplicar sus descendientes y hacerlo extremadamente fructífero.
Y aunque Ismael fue considerado un error, nacido de lo que la escritura llama obras de la carne Tratar de que suceda por nosotros mismos Dios en su misericordia dijo voy a tomar ese error y haré un milagro.
Voy a hacer salir algo significativo de él Abraham, a pesar de tus errores a pesar de como lo arruinaste y como Abraham.
Todos tenemos algunos Ismaels, equivocaciones, ytándose las cosas uno mismo involucrándonos en cosas que no deberíamos ahora es un desastre el accosur susurra constantemente Dios no ha en decirte, sabías qué hacer, soy mantente al margen de la vida, no crea esas mentiras, Dios tiene misericordia para cada error, a Dios le encanta hacer al enemigo, pagar por traerle ese problema, y se mantiene la fe, Yo no solo lo hará pasar, tomará el desastre que usted hizo, lo limpiará y lo sacara mejor de allí.
Abraham tuvo un hijo llamado Isaac, Exacto, tuvo un hijo llamado Jacob.
Jacob tuvo un hijo llamado José, y Abraham fue el tatarabuelo de José.
Usted recuerda que siendo adolescente, los hermanos de José lo tomaron y lo lanzaron a un pozo.
Iban a dejarlo allí para que muriera, Pero la escritura dice: Una Caravan de Ismaelitas pasó por allí Estos fueron los descendientes de Ismael parte de la gran nación que Dios prometió Abraham.
Al ver los hermanos de José a los israelitas cambiaron de opinión y decidieron venderles a José.
Si no hubiera sido por las Ismaelitas, José habría muerto allí en el pozo.
Nunca habría llegado al palacio, ni habría estado a cargo de los alimentos en Egipto.
Durante la hambruna, años después, los israelitas no hubieran tenido lo necesario para sobrevivir. ¿Qué estoy diciendo?
El error de Abraham se volvió el milagro de su tataranieto José, Así era asombroso, es Dios.
Él tiene un plan. Incluso para nuestros errores.
Aunque lo arrimemos, La escritura dice: Dios va a hacer que todo, pobre para bien.
El no solo puede corregir una situación complicada, si no puede usarla de alguna manera años después para bendecir sus descendientes algunos de ustedes piensan mis descendientes van a estar muy bendecidos todos los errores que cometí Pero a veces cometemos errores como Abraham, ¿cuántos tratamos de hacer lo correcto?
No, ese corazón está en el lugar correcto, pero Ramos, creemos que Dios nos ayudará porque es misterioso y nos estamos esforzando.
Otras veces, sabemos qué es lo correcto, Sabemos lo que hay que hacer, pero hacemos justo lo opuesto, entonces pensamos, no merezco la bondad de dios, joder, yo hice el deshace, sabía que no debía juntarme con esos amigos, lo hice de todos modos, ahora estoy en problemas, ahora tengo esta adicción, sabía que debía controlar mi temperamento, sería que debíamos darme la lengua, pero seguí cediendo.
Ahora no tengo trabajo, ahora perdí una relación.
Cuando nos acarreamos problemas, Pensamientos de culpa y condenación, Bormandean nuestra mente diciendo Dios no va a ayudarte Sabías que hacer Ahora mantente al margen de la vida Así se sintió Jonás en la escritura, Dios le dijo que fuera a la ciudad de Nínive.
Tenía instrucciones claras, sabía exactamente lo que se suponía que haría, pero Jonás no quería ir a Nínive, se subió a un barco que iba en dirección opuesta, La escritura dice, el señor hizo que un gran viento soplara en el mar y se levantó una tormenta tan violenta, que amenazaba compartir el barco en dos.
Es interesante que el señor enviara la tormenta, Dios sabe cómo obtener nuestra atención, y cuando uno sabe que va por el camino equivocado, como aquel barco, las cosas empiecen a derrumbarse.
No puede alejar todos los vientos con oración, usted puede decir silencio quédate quieto todo el día, pero los vientos quizás no se calmen, es porque usted causó el problema, y Dios lo ama demasiado para dejar que pierda su destino.
No va a dejarlo, y año tras año, por la ruta equivocada, sin llamar nunca su atención.
Y a veces es el enemigo peleándonos, intentando apartarnos de nuestro destino.
Por eso tenemos tormentas, dificultades, pero otras veces nos acarreamos solos el problema si solo regresáramos a la ruta correcta si hiciéramos lo que deberíamos hacer esos vientos se calmarían La gente que navegaba con Jonás dijo: ¿Quién es responsable de causar todo este problema?
Jonás dijo: Soy yo, soy hebreo, adoro a Dios, sé a dónde se supone que debería ir, pero estoy huyendo del señor.
Cuando usted huye del señor, está huyendo de su destino, no solo va a causarle problemas, va ocasionarle problemas a las personas a su alrededor Al lanzar a Jonás por los borda, los vientos se calmaron La tormenta paro nuestras decisiones no solo nos afectan, afecta a nuestra familia, afecta a nuestros hijos, y si no hace lo correcto por usted mismo, al menos hágalo por sus hijos, al menos hágalo por su familia.
Jonás fue bastante maduro para mi tío, soy la causa, ese es el primer paso a la victoria, mientras este creando excusas pensando no importa entonces los vientos las tormentas la dificultad va a continuar Cuando Jonás estaba en el mar, lanzado por la borda de seguro pensó, estoy acabado.
No tengo a quien culpar. Todo esto fue mi culpa.
De repente, un pez enorme, se tragó a Jonás.
Dios, en su gran misericordia decía, Jonás, puedes huir, pero no puedes esconderte.
No he terminado contigo, tengo un destino que debes hacer realidad.
Esa amistad dijo, si bajara las profundidades del mar, o subiera a la altura de los cielos Dios estaría allí Usted no puede escapar de él No ha cometido demasiados errores no lo ha arruinado demasiadas veces el llamado de Dios para usted es irrevocable y significa que Dios no va a cambiar de opinión porque usted se desvió, no lo va a dejar usted solo hasta que regrese al sendero correcto, Mientras más pronto lo haga, mejor va a estar usted.
Jonás estaba asentado en la panza del pez, estaba oscuro, incómodo, apestaba, la mayoría se ve aquejado, pero algunas no, estaba agradecido de estar vivo.
Sabía que fue la misericordia de Dios estuviera certeza y esperándolo y Dios permitirá tormentas cuando nos salgamos de la ruta Quizá permita algo que capte nuestra atención pero no a dejar que esas dificultades tomen su vida.
Tres días después, S.P. Escupió a Jonás sobre tierra seca, La escritura dice, la palabra del señor vino por segunda vez a Jonás.
Dios le dio otra oportunidad, ¿Qué dijo Dios esta vez?
Ve a la ciudad de Nínive, lo mismo que dijo la primera vez.
Amigos, yo no voy a cambiar de opinión Sería mejor que usted hiciera lo que le está pidiendo.
Te dará una segunda oportunidad, una tercera oportunidad, una vigésima oportunidad.
Pero va a estar despentuoso, antes usted regrese, al rumbo correcto. Sí, él tendrá un pez allí para salvarlo.
Sí, él extraará un milagro de ese error, pero en algún punto tiene que asumir su responsabilidad y decir, soy el Jonás, voy en contra de lo que sé que está bien Me junto con estos amigos Que sé que estén haciéndome caer Vivo siendo negativo Criticón Difícil de llamar no estoy siendo disciplinado en lo que veo, eso causará inestabilidad, no solo para usted, sino para aquellos a su alrededor, Y Dios sabe que no es perfecto, no le pide que jamás cometa un error, pero nos pide que tratemos con las cosas, que nos están reteniendo que no dejemos que las mismas áreas que comprometimos nos mantengan los premios año tras año tiene algunos ninives a donde vaya, algunas personas a las que impacte, niveles nuevos de su destino.
David lo dijo así, Los pasos de un hombre justo son ordenados por el señor, aunque cayere no se ha destruido porque el señor estará allí para levantarlo.
Está diciendo, aunque Dios esté dirigiendo nuestros pasos, habrá veces en las que caeremos, cometemos errores, nos desviamos Dios no dice se acabó, me cansé de ti Igual que con Jonás Dios estará justo allí para ayudarle a levantarse ayudará a regresar al camino correcto.
Es como el sistema de navegación que quizá tenga en su auto.
La mayoría de nosotros tenemos un sistema GPS incluso en nuestro celular, uno anota la dirección y la computadora calcula la mejor ruta, luego empieza a decirle dónde vaya, cosas como de la vuelta a trescientos metros, manténgase a la izquierda y entra a la autopista.
El otro día iba manejando a la casa de un amigo mío, vive con unos cuarenta y ocho kilómetros, y la voz femenina en H.P.
Se apreció y dijo, salga en un cuarto de kilómetro.
Bueno Victoria y yo estamos hablando, había mucho tráfico y accidentalmente me pasé esas salidas.
Y si se pierde una vuelta o no obedece lo que la voz le dice que haga no regresa y le dice perdió su salida regresa intente de nuevo sino recalculando la ruta.
El sistema de navegación está diseñado para personas que cometen errores, No le da solo un camino, y si lo pierde, se acabó.
Mientras usted tenga gasolina en su auto, o batería en su celular, va a decirle ¿Cómo llegar hasta su destino?
Jamás he dado una vuelta equivocada Y la voz ha venido a decir: Lo siento, no puedo llegar allá desde aquí.
Es demasiado perdido. Ni una vez ha dicho, ha de ser cuidadoso, tantas veces ni órdenes.
Ya me cansé de usted, se acabó. Una vez yo sabía el camino que quería recorrer.
Estaba en un vecindario con el que estaba familiarizado, pero el sistema GPS me decía que me fuera por una ruta diferente.
Quería que diera vuelta a la izquierda y luego continuaré calle abajo.
Bueno, yo quería ir calle abajo y luego mirar a la izquierda. Estaba igual. Pero por casi tres kilómetros.
Cada cuadra me decía, vuelta a la izquierda y luego decía, recalculando ruta.
Hoy eso, cada diez segundos, recalculando ruta, recalculando ruta.
Es interesante que sin importar cuán ter fuera yo, sin importar cuánto ignorar esa voz, nunca se enojó conmigo.
Jamás vino a decirme, ¿es un perdedor? No sé si este sistema, nunca te voy a ayudar.
Solo siguió recalculando la ruta, tratando de llevarme a mi destino.
Si la voz del GPS puede recalcular continuamente cuando salimos de ruta.
¿Cuánto más el creador del universo recalculará nuestra ruta? Cuando cometamos un error.
Si ella no se da por vencida, ¿por qué creemos que nuestro padre celestial sí lo hará?
Bueno, Joel, ¿por qué me salí demasiado del rumbo?
No de haber seguido ante esta adicción, de haber criado mejor a mis hijos, debe quedarme en la iglesia con Dios en primer lugar, lo bueno es que no ha dado demasiadas vueltas equivocadas, no ha perdido demasiadas salidas, Su padre celestial no está enojado con usted, está diciendo, recalculando ruta.
Aún tengo la manera de llevarte a tu destino, ese error no detuvo mi plan.
Ese retraso no cancelo tu propósito. ¿Por qué no deja de culparse por eso?
Deje de revivir sus fallas y todas las veces que lo arruinó y regrese al camino correcto.
Todavía no es muy tarde. La misericordia de Dios mayor que cualquier error cometido.
A diferencia de la voz del GPS, Dios conoce el final desde el principio.
Él conoce cada error que usted cometería y él ya ha recalculado su ruta.
Y usted todavía puede cumplir el mejor plan que Dios tiene para usted. Abraham y Sara lo hicieron.
Ellos cometieron ese error, Abraham tuvo un bebé fuera del matrimonio en un punto, Abraham mintió, y dijo a todos que Sara y su esposa era su hermana, Dios lo dijo, me cansé de ustedes, es una familia muy disfuncional.
Mienten, son y pacientes, Dios siguió recalculando la ruta, siguió dándoles otra oportunidad, a los cien años Abraham vio que la promesa se cumplió y Isaac nació el hijo prometido, Quizá usted tomó decisiones que demoraron las cosas.
Se desvió del curso, pero no está atorado.
Dios tiene una ruta nueva, y si recupera su pasión, se sacude la culpa, Dios lo llevará a donde se supone que debe estar.
A ningún lugar secundario sino al mejor plan que el tiene para usted Cuando los israelitas estaban en el desierto dirigiéndose a la tierra prometida se cansaron y pensaron a quejarse.
Y la escritura dice, aunque fueron tercos y rehusaron puede ser los mandamientos de Dios, aún fue bueno con ellos.
Ese fue Dios recalculando su ruta. Ellos no decían sus mandamientos, Dios no dijo, me casé de ustedes.
Dios le siguió dando agua cuando tenía sed. Comida cuando tenía hambre.
En un punto hicieron un ídolo, y dijeron, este es el Dios que nos sacó de la esclavitud.
Después de todo lo que Dios hizo por ellos, abrió el mar rojo, lo sacó de la mano de Faraón.
Uno prefería que Dios diría: Me cansé de ustedes. Aráglense solos. Pero la escritura dice: en su misericordia.
Dios no los abandonó. Él es Dios de perdón, lento para la ira.
Y lleno de amor inagotable y bondades.
Y cuando cometemos errores, Dios no nos abandona, cuando nos enviamos de curso, cuando no obedecemos sus mandamientos, no nos descarta, usted puede darle la espalda a Dios, pero Dios no le va a dar la espalda a usted.
Quizás se ha desviado, ha tomado malas decisiones, pero sepa que Dios ya ha recalculado su ruta, ya tiene una nueva manera, de llevarlo a su destino.
Mi papá se casó a una temprana edad.
Tristemente, su matrimonio no funcionó, Y mi papá estaba devastado, renunció a la iglesia, los líderes denominacionales le dijeron que nunca pasaría otra vez.
Pensó que sus días de ministerio no creyó que tendría una familia dejó el ministerio y empezó a vender seguros cada pensamiento le decía, eres un fracasado, lo renace, nada bueno ahí en tu futuro.
No podía, o ir a Dios diciendo, recalculando ruta. Aún tengo una forma. Yo extraigo milagros de los errores.
Dios no lo abandonó. ¿Cuándo se salió de curso?
Fallo pero como digo David, Dios estaba justo allí para volver a levantarlo.
Bueno eventualmente mi papá se sacudió la culpa, dejó de escuchar las voces acusadoras y dos años después regresó al ministerio, Y un día, él estaba en el hospital visitando miembros de su iglesia, cuando notó a una hermosa enfermera joven.
Era mi mamá, quedó tan emocionado de ella, que empezó a buscar cualquier oportunidad que pudiera hallar para él a ese hospital.
Visitaría su tío abuelo, primo segundos o vecinos de al lado, si lo pudiera.
Él estaba esperando que algunos miembros de su iglesia se enfermaran para poder ir al hospital.
Mi mamá, no sabía qué estaba pasando. Dijo un amigo, ese pastor tiene la congregación más enferma que conozco.
Al final se percató que él estaba allí para ver a ella.
Resumiendo, se enamoraron, se casaron y tuvieron cinco hijos, me alegra que Dios recalculara la ruta, o yo no estaría aquí hoy.
Pero mi papá, sigo adelante con un ministerio, tocó al mundo, estuvo casado con mi mamá, más de cuarenta y cuatro años.
¿Qué estoy diciendo? Ningún error cometido. Es demasiado para misericordia de Dios.
Él sabe como cambiar ruta deja de mortificarse viviendo con culpa pensando que ya vio sus mejores días no estaría amigo, a menos que Dios tuviera algo mayor en su futuro.
Eso es lo que sucedió con Moisés, cometió un error, siendo joven, supo que Dios lo había llamado a liberar los israelitas de la esclavitud, pero como Abraham y Sara.
Le entró la prisa, encontró celos sus propias fuerzas. Vio un esclavo hebreo, siendo maltratado.
Pensó que nadie estaba viéndolo, así que mató al hombre que lo estaba maltratando.
Al siguiente día, alguien le dijo al faraón, Moisés debió oír para salvar su vida, pasó años muy lejos en el desierto, escondiéndose.
Esto no fue lo que planeó.
Parecía que su destino estaba perdido, La culpa era suya y de nadie más. Dios no lo descartó.
Dios no dijo Moisés sabías qué hacer, ¿por qué no esperaste? Dios dijo simplemente. Recalculando ruta.
Cuarenta años después, Moisés seguía aún en el desierto, pensando que lo olvidaron, renunciando sus sueños, y de pronto una zarza explotó enfrente de él, una combustión espontánea, ardió y ardió, lo extraño fue que la sarsa no se consumió, intrigado, Moisés se acercó para ver lo que estaba sucediendo.
Y una voz retumbó Moisés, Moisés, quítate las sandalias, estás parado en tierra santa, Moisés estaba confundido, pensando, fallé, he cometido errores, pensé que estaba acabado, pero lo oigo, llamando mi nombre, No una vez, sino dos.
Moisés, Moisés, si Dios hubiera dicho una vez, hubiera pensado, estuve oyendo cosas.
Ese sol está afectándome, Dios lo dijo dos veces a propósito para que no tuviera ninguna duda Y a los ochenta años de edad después de una desviación de cuarenta años Dios recalculo la ruta.
Moisés siguió adelante hasta liberar a los israelitas y cumplió su propósito.
Creo que Dios está recalculando hoy algunas rutas Quizá ha cometido errores Cree que lo ha arruinado demasiadas veces Pero usted necesita prepararse como Moisés, una sarz ardiente viene en camino.
Usted lo arruinó, pero si escucha, oirá Dios llamando su nombre, Está diciendo, recupera tu pasión, sacudete a la culpa, prepárate para alcanzar nuevos logros.
Todavía puede volverse la persona plena que Dios creo, no ha terminado con usted, y si hace esto, yo creo y declaro que Dios va a extraer milagros de sus errores, él corregirá situaciones complicadas, restaurará lo que el enemigo robó y lo llevará a la plenitud de su destino, en el nombre de Jesús.
Y si lo recibe hoy, puedo decir amén. Me gustaría darle la oportunidad.
Que ser a Jesús el Señor de su vida, puede orar conmigo, solo diga Señor Jesús, ni arrepiento de mis pecados Entre mi corazón Te hago mi señor y salvador Se hizo esta sencilla oración creemos que usted nació de nuevo busque una iglesia donde enseña la biblia y tenga a dios en primer lugar