Evangelio de Hoy Jueves 16 de Mayo de 2024 | REFLEXIÓN | Red Catolica
que todos sean uno, como tú, Padre.
Evangelio de Hoy Jueves 16 de Mayo de 2024
Eucaristía Digital
1- Jesús, que me abra al amor de tu Padre, y aprenda a llamarlo: Padre nuestro.
2- El enemigo de Dios y del hombre, el diablo, no puede nada contra el Evangelio, contra la humilde fuerza de la oración y de los sacramentos.
3- No nos pudo pasar algo más genial que tener un Papá como Dios, nuestro Señor.
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EVANGELIO DE HOY JUEVES dieciseis DE MAYO DEL dos mil veinticuatro
Proclamación del santo evangelio según San Juan En aquel tiempo Jesús levantó los ojos al cielo y dijo padre no sólo te pido por mis discípulos sino también por los que van a creer en mí por la palabra de ellos para que todos sean uno como tu padre en mí y yo en ti somos uno a fin de que sean uno en nosotros y el mundo crea que tu me has enviado yo les he dado la gloria que tu me diste para que sean uno como nosotros somos uno Yo en ellos y tú en mí para que su unidad sea perfecta y así el mundo conozca que tu me has enviado y que los amas como me amas a mí padre quiero que donde yo esté estén también conmigo los que me has dado Para que contemplen mi gloria la que me diste porque me has amado desde antes de la creación del mundo padre justo el mundo no te ha conocido pero yo sí te conozco y estos han conocido que tú me enviaste yo les he dado a conocer tu nombre y se los seguiré dando a conocer para que el amor con que me amas esté en ellos y yo también en ellos.
Palabra del Señor Gloria ti, Señor Jesús.
Amados hermanos en Cristo, Para meditar el día de hoy este texto del santo evangelio nos quedaremos con los siguientes cuatro puntos de reflexión: En este primer punto, reflexionemos en la frase: Padre, no solo te pido por mis discípulos, sino también por los que van a creer en mí por la palabra de ellos.
Hoy el evangelio nos presenta el momento en que el Señor oro a su padre antes de vivir los momentos de su pasión.
A este episodio se le conoce como la oración sacerdotal.
En ella Cristo ahora por sus discípulos y por las personas que creerán en él por medio del testimonio de ellos.
Muchas personas encuentran sentido en sus vidas y se interesan en vivir sus mandamientos.
Todos consecuencia del evangelización que realizaron los apóstoles y los llamados y a quienes Dios le suscite en su corazón el deber de predicar.
Como bautizados y miembros de la iglesia del Señor, debemos contribuir y participar en la tarea universal de llevar y transmitir el mensaje del evangelio.
Estamos llamados a estar en esa honorable fila de predicadores de la palabra porque tenemos al mismo espíritu que inspiró a los apóstoles y los llenó de sabiduría para su misión.
Seamos anunciadores del amor de Dios y compartamos sus promesas a los demás, pidamos al Espíritu Santo que nos forme y nos dé la confianza para evangelizar y así seguir la cadena interrumpida en la transmisión de las verdades del evangelio.
De esta manera haremos que el reino de Dios crezca y continúe presente en la vida del hombre.
En este segundo momento de la reflexión meditemos en la frase a fin de que sean uno en nosotros y el mundo crea que tú me has enviado para que las personas del mundo crean que Jesús es el enviado de Dios, nosotros los bautizados, debemos tener unidad de espíritu y de obras poniendo empeño en conservar la unidad del espíritu con el vínculo de la paz Siendo un solo cuerpo, siguiendo la inspiración de un mismo espíritu, teniendo un solo señor, una sola fe y un solo bautismo.
Pero podemos preguntarnos ¿por qué Dios quiere revelar su reino a través de la unidad de todos los que creemos en él?
Ya que sería más fácil hacer que el mundo crea por medio de sus milagros y del mismo testimonio de la vida de Jesucristo.
Que padre o madre no se clarifica y se siente pleno al ver a sus hijos, siendo obediente y amándose entre sí.
La unidad es lo que mantienen las familias. La unidad es la más excelsa prueba del amor.
Por ejemplo, cuando los esposos Estados Unidos o en el hogar florece, se respira un aire puro y las bendiciones de Dios son palpables por eso Dios ve en la unidad de su pueblo no mejor para que el mundo crea en él ni es la intención de Jesús en su oración sacerdote al ser de nosotros una iglesia unida para que el amor del Padre sea visible y todas las personas puedan reconocerlo, es nuestro deber y obligación hacer de la viña de Dios, una tierra fortalecida en el amor y la unión fraterna, comprometamos en buscar dicha unidad y hacer que el rol del Señor sea una imagen viva y presente.
En este tercer punto, profundicemos en esta petición del Señor el Padre.
Quiero que los que tú me diste estén conmigo donde yo esté, nuestro salvador nos ama y nos aprecia demasiado, y quiere que estemos en el cielo dándole gloria con él al padre eterno.
Seguramente nosotros también pediríamos a Dios que salve a toda nuestra familia, a nuestros amigos y a todas las personas por las cuales sentimos afecto, Es una petición muy bonita y agradable para Dios, ya que él es el más interesado en vernos a todos en la morada celestial.
Jesús nos demuestra con su oración que somos su familia, sus hermanos y amigos y por eso busca nuestra salvación.
Jesús es un verdadero amigo y hermano nos sigue esperando y aceptando tal como somos porque nos ama tanto que no importa cuán engrane toceamos a él, tiene sus ojos en miras de nuestra salvación y se afana para que vayamos de camino a donde su padre.
Él quiere que los que su padre les confió, ninguno se pierda, esta es la esperanza que nos llevamos hoy, de que estaremos con el hijo en el trono de su padre.
Nos espera un lugar en el cielo para convivir como hermanos y experimentar el amor eterno del Señor.
En este cuarto punto meditemos sobre la frase, para que contemplen mi gloria la que me diste, la promesa del estadía en el cielo, es para que contemplemos la gloria del hijo aquella que tenía desde el principio.
Si nos preguntáramos sobre cómo sería la vida en el cielo, y de las cosas que se harían en ese lugar no tendríamos una información exacta, porque nadie, ningún ser humano, ha ido hacia allá y ha regresado para contarnos cómo es vivir en la Jerusalén celestial.
Solo tenemos las palabras de Jesús donde nos dice que el cielo es gozo, amor, justicia y paz eterna.
Los apóstoles y todos los santos que ahora se encuentran en asamblea permanente de adoración y contemplación Seguramente no querrán volver a este mundo Porque allá no se limitan ni son encerrados por el tiempo ni espacio Motivémonos en dar más de lo que estamos dando Luchemos para vencer nuestros pecados para aumentar nuestra fe, para hacernos fuertes en las tribulaciones y crecer en amor y sabiduría.
Nuestra meta es el cielo y sólo en él debemos trabajar.
Nuestras fuerzas deben ir dirigidas hacia la santidad, hacia el amor, reflejemos la gloria del Señor en nuestras obras para que otros puedan dar testimonio de Dios y formen parte de su reino.
Pidamos perdón a Dios por nuestra indiferencia sus mandamientos Hagamos todo lo posible por limpiar nuestra vida para que podamos ser más libres y en aquel día podamos pasar a la eternidad y contemplar la gloria de Jesús.
Ahora con ayuda de las siguientes preguntas analicemos nuestro corazón.
Oro a Dios por mi familia, Estoy consciente de la importancia de que debemos estar unidos como discípulos de Cristo, ¿mi familia está unida en el amor?
Quiero contemplar la gloria de Dios, Oremos. Gracias Jesús por demostrarnos tu amor, orando por nosotros.
Sabemos que quieres lo mejor para los hijos de tu padre, queremos ofrecerte nuestros sueños y nuestras vidas como ofrenda tu gran bondad.
Oramos también por la unidad de las familias y de la iglesia para que todos demos gloria a Dios y hacer que el mundo crea en tu padre.
Te lo pedimos a ti que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo y eres Dios por los siglos de los siglos Amén.
Que el Señor te bendiga abundantemente en este día, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
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