Evangelio de Hoy Lunes 20 de Mayo de 2024 | REFLEXIÓN | Red Catolica

La paz con vosotros.

Evangelio de Hoy Lunes 20 de Mayo de 2024

Eucaristía Digital

1- Espíritu Santo, mira mi vacío si Tú faltas, por eso te suplico vengas a hacer en mi tu morada.

2- Por eso también Cristo, como el Padre, sopla su Espíritu sobre sus apóstoles para transmitirles la vida.

3- Él es el Espíritu Santificador, que da vida, alienta todo y “anima” todo.

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EVANGELIO DE HOY LUNES, veinte DE MAYO DEL dos mil veinticuatro
Proclamación del santo evangelio según San Juan En aquel tiempo, junto a la cruz de Jesús, estaban su madre, la hermana de su madre, María la de Cleofás y María Magdalena tal vez a su madre y junto a ella al discípulo que tanto quería Jesús dijo a su madre mujer ahí está tu hijo luego dijo al discípulo ahí está tu madre y desde entonces el discípulo se la llevó a vivir con él.
Después de esto sabiendo Jesús que todo había llegado a su término para que se cumpliera la escritura dijo tengo sed Había allí un jarro lleno de vinagre.
Los soldados sujetaron una esponja empapada en vinagre a una caña de hisopo.
Y se la acercaron a la boca Jesús probó el vinagre y dijo: Todo está cumplido e inclinando la cabeza entregó el espíritu Entonces los judíos como era el día de la preparación de la pascua para que los cuerpos de los ajusticiados no se quedaran en la cruz el sábado porque aquel sábado era un día muy solemne pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y los quitaran de la cruz fueron los soldados le quebraron las piernas a uno y luego al otro de los que habían sido crucificados con Jesús.
Pero al llegar a él viendo que ya había muerto no le quebraron las piernas.
Sino que uno de los soldados le traspasó el costado con una lanza e inmediatamente salió sangre y Agua Palabra del Señor Gloria a ti, Señor Jesús.
Querida comunidad, antes de pasar a la reflexión del evangelio, Hagamos mención de la memoria obligatoria que hoy la liturgia nos presenta.
Cada lunes después del domingo de Pentecostés, Celebramos la memoria de la Bienaventurada Virgen María, padre de la iglesia, esta memoria es de la relación maternal de la Santísima Virgen con la Iglesia.
Como buenos hijos de nuestra madre, Regocijero en sus brazos para que nos consuele y nos anime a seguir buscando la santidad.
Ahora para contemplar hoy el contenido del santo evangelio, prestaremos atención a los siguientes cuatro puntos en este primer momento meditemos sobre la frase Mujer ahí está tu hijo.
Hoy tenemos la oportunidad de darnos cuenta de un grandioso regalo que el Señor Jesús ha tenido con nosotros.
Él entrega a su discípulo amado en manos de su madre y en la persona del discípulo amado, la iglesia se ha manifestado diciendo que en él estamos representados todos los fieles creyentes en Cristo, sino que también nos dejó a su más preciado baluarte que es la maternidad de su propia madre, y que significa ser hijo de María, ser hijo de María es hacer parte de una obra espiritual basada en la oración, el servicio y la caridad, asumiendo el rol de ser un discípulo y reflejando a Jesús en cada acto de la vida bajo la protección y el manto de María Santisima.
Un auténtico Mariano aprende de ella el valor del silencio y la donación total a la voluntad de Dios.
En María todos tenemos la oportunidad de aprender a ser más como Jesús, porque ella conoce bien a su hijo y nos ayudará a imitarlo para darle mayor honra y gloria a nuestro salvador.
En un segundo momento, profundicemos en la frase: Ahí está tu madre.
Como decíamos anteriormente, En Juan estamos todos los que creemos en el Señor.
Jesús también nos confió el cuidado y la presencia de María.
Ella es nuestra madre, madre de la iglesia y de todo hombre.
En María descubrimos que la maternidad trasciende y que no es solo carnal, sino que se hace espiritual.
Ella nos enseña que podemos ser fecundos en ordinario de la vida, que con nuestros consejos y orientación, Podemos engendrar hijos para Dios, discípulos de Jesús y almas para el cielo.
María jugó y aún juega un papel esencial en la vida del creyente porque sabemos que Dios no quiso poner en marcha su plan sin su consentimiento En ello vemos el rol de María en la salvación y la impresionante delicadeza de Dios que siendo el creador de la vida, Respeta siempre la libertad del hombre.
Ahí tienes a tu madre, dijo Jesús a San Juan su discípulo amado.
Y nos lo dice hoy también a nosotros, es todo un privilegio para nosotros el saber que tenemos a una madre espiritual en el cielo.
Una madre que nos quiere más de lo que podemos imaginar una madre que está pendiente de nuestros pasos que se sienta como nosotros y que vela por nuestras necesidades, abramos nuestro corazón y dejemos que ella sea parte de nuestra vida, para sentir la cerca, para estar con ella, para dejarnos aconsejar y consolar de ella.
En ese de tercer punto, meditemos en la expresión. Tengo sed. Este pasaje muestra la verdadera humanidad del Señor.
Aquel que le había prometido a agua viva la mujer junto al pozo, así de asombrosa la paradoja de la encarnación, Dios logró la redención convirtiéndose en un ser humano como los que necesitan ser redimidos?
Recordemos que el Señor prendió su misterio con hambre y sed por los días en el desierto, claramente su ministerio estaba marcado por su humanidad, aprendamos del Señor su desprendimiento y la primacía que tenía por la humanidad, porque se la pasó donándose y entregándose por los pecados y estando en la cruz se preocupó por salvar a sus dos acompañantes.
Su actuación refleja que salvador verdadera y completamente se despojo a sí mismo por eso hoy calmemos la sed de nuestro señor con nuestra conversión y obras.
En este cuarto punto de la reflexión, meditemos sobre la frase, pero ahora que ha resucitado y se encuentra en el cielo con cada gesto de amor a nuestras familias con cada ayuda en mano que damos a los más necesitados Estamos curando y siendo médicos para el Señor.
Hoy que celebramos la memoria de María, madre de la iglesia, incomendémonos a su cuidado y arropémonos con su manto para recibir el calor y llenarnos de su amor para crecer en caridad y tolerancia.
Si nos unimos en oración y pedimos la presencia del Espíritu Santo podemos transformar nuestras vidas y de ese manera a calmar la sed de justicia que tienen nuestro Señor.
No nos olvidemos también de las necesidades humanas del prójimo y necesitando de alguien que los acompañe y no se escuche.
Ahora con ayuda de las siguientes preguntas busquemos en nuestro corazón una respuesta está Dios, ¿tienes María para mí?
Doy gracias al Señor por acordarse de la humanidad y habernos dado a María por madre de la iglesia, ¿Calmo la sed del Señor con mis buenas obras?
¿Me arrepiento de mis pecados? ¿Oremos?
Señor, por eso te pedimos perdón e imploramos tu misericordia y bondad, aumenta nuestro amor y caridad, para calmar la sed de otros y de esta manera poder sanar las heridas que hemos causado.
Te lo pedimos a ti, que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos amen.
Que el Señor te bendiga abundantemente en este día en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo Amén.
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Te saluda tu hermano Daniel, deseándote un día lleno de bendiciones. Somos Red Católica: