Evangelio de Hoy Miercoles 15 de Mayo de 2024 | REFLEXIÓN | Red Catolica

Tu Palabra es verdad.

Evangelio de Hoy Miercoles 15 de Mayo de 2024

Eucaristía Digital

1- Señor, concédeme no tener en la vida otra tarea, otra ocupación, otra ilusión que ser santificado en la verdad.

2- Exige una continua conversión, un morir sacrificial a sí mismos qué es la condición para pertenecer plenamente a Dios.

3- ¡Qué intimidad tan profunda revelan las palabras de Jesús para con su Padre! Son las últimas palabras, la oración que da comienzo a su pasión.

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Evangelio de hoy miércoles quince de mayo del dos mil veinticuatro
Proclamación del santo evangelio según San Juan En aquel tiempo Jesús levantó los ojos al cielo y dijo padre santo, cuida en tu nombre a los que me has dado para que sean uno como nosotros Cuando estaba con ellos Yo cuidaba en tu nombre a los que me diste Yoelaba por ellos y ninguno de ellos se perdió excepto el que tenía que perderse para que se cumpliera la escritura.
Pero ahora voy a ti y mientras estoy aun en el mundo digo estas cosas para que mi gozo llegue a su plenitud en ellos.
Yo les he entregado tu palabra y el mundo los odia a Porque no son del mundo como yo tampoco soy del mundo No te pido que los saques del mundo, sino que los libres del mal, ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.
Santificalos en la verdad, tu palabra es la verdad, así como tu me enviaste al mundo así los envío yo también al mundo yo me santifico a mí mismo por ellos para que también ellos sean cuantificados en la verdad palabra del Señor Gloria a ti, Señor Jesús.
Querida familia, para explicar esta sencilla reflexión y examinar nuestra vida la luz de la palabra divina, centremos nuestra tensión en los siguientes cuatro puntos.
En el primer momento de la reflexión, meditemos en esta frase.
Padre santo, cuiden tu nombre a los que me has dado, Jesús or al Padre y nos encomienden sus manos, Es un gesto de amor que el Señor hace cada día de nuestras vidas.
Podemos estar seguros que nuestro Salvador, hora por nuestra salud, bienestar y trabajo, con la confianza de saber que Jesús vela por nosotros, podemos salir cada día nuestros trabajos, y a realizar nuestros quehaceres confiados en que nada malo nos pasará porque Cristo aleja los peligros con su oración Pero la oración del Señor no acoge solo a los que estamos en su camino, también a ropa los que no creen en él.
Porque él quiere que su padre cuide de todos y en su corazón no hay espacios para la exclusión.
Tanto buenos como pecadores, somos protegidos y ayudados por la oración del Señor.
Como hijos de Dios, podemos tomar el de nuestro Señor Jesucristo y orar por todas las personas que nos rodean.
La oración cree un escudo en nosotros Y también en las personas por quienes oramos, podemos pedirle al padre que cuide a los que él nos ha dado, a nuestros hijos nuestros padres, hermanos y amigos que forman parte de nuestra familia.
Hagamos una ofrenda a nuestro señor como paga por su oración e intercesión ante el padre.
En este segundo punto de la reflexión, mediemos en la frase: para que sean uno como nosotros.
Esto lo podemos entender de muchas maneras, pero el resultado siempre es el mismo buscar la unidad.
La voluntad del Señor es que seamos uno en él, es decir, que todos comulguemos sus mismos mandamientos, y nos rijamos bajo el mismo evangelio.
Si nuestro señor quiere la unidad, a eso debemos nosotros también apuntar, a ser unidos en el señor y a cuidar toda la riqueza del reino de los cielos.
Cuánta gloria damos a Dios cuando nos unimos bajo un mismo propósito, cuando oramos por una sola causa, las familias que son unidas en el Señor, También dan gloria a Dios porque así refleja la unidad que existe entre las personas de la naturaleza divina.
Hagamos una mirada sobre nuestra vida y entorno, y miremos qué es lo que está dividido fraccionado, si nuestra casa hoy se encuentra alejada del amor de Dios y hay espacios para el distanciamiento entre sus miembros, miramos a nuestro padre que nos de la fuerza de su espíritu para volver a la unidad y recuperar el amor que se haya perdido.
Examinemos los campos de nuestra vida Y si en algo estamos fallando, trabajemos en eso para sentirnos en plenitud.
No olvidemos la voluntad del Señor que todos seamos uno.
Que tengamos una misma fe y vivamos bajo el mismo espíritu.
En el tercer punto de la reflexión, meditemos esta frase, Ellos no son del mundo como tampoco yo soy del mundo.
Venimos es a realizar las obras del espíritu, Porque venimos de Dios y a él volveremos, porque no somos del mundo, o debemos hacer lo que en él se nos pide, Ni tomar las cosas que en él encontramos, como el afán por el dinero, buscar la fama, el poder y la gloria del no.
Muchos hoy en día están convencidos que son del mundo mantienen en sus deleites pero a nosotros los que le pertenecemos a Dios, se nos ha dado el evangelio para que viviendo en el mundo no seamos de él, sino que no sepamos mover en él.
Como hijos de Dios estamos llamados a vivir en su espíritu, en hacer las obras propias del hijo, como practicar la justicia, el amor, la misericordia, la bondad y la fraternidad estas y otras cosas son actitudes del cielo y contrarrestan las actitudes de la carne o pagan la fuerza que tiene el mundo y nos permiten vivir conectados a las exigencias del evangelio.
Refugiémonos en la fuerza del amor de nuestro Dios, mantengamos en el buen camino procurando siempre cumplir la voluntad del Señor para nunca ser hijos del mundo.
Ahora en el cuarto momento de la reflexión, meditemos en la responsabilidad de santificarnos en la verdad.
La verdad aparece como fuente de purificación y de santificación, porque si la mentira corrompe el alma, la verdad sana y la libera, y así eran nuestras vidas en el pasado cuando vivíamos en el pecado, cuando no conocía al señor ni de su palabra.
Ahí entonces vivíamos en la mentira, y por eso cada vez nos hallábamos más apartados de Dios y alejados de la verdad en Jesucristo.
Pero una vez la luz del Señor nos iluminó, pudimos darnos cuenta de que estábamos en un mundo de mentira que nos brindaba una falsa felicidad y paz, luego nos fuimos adentrando en Cristo, y nuestros ojos sin mente fueron aclarar y purificados por la palabra del evangelio fue entonces cuando entramos a la luz verdadera y descubrimos solo en el Señor está la paz verdadera y la completa y auténtica felicidad, pero debemos permanecer en la verdad que ya se nos ha revelado.
Porque el mundo de mentira sigue presente y nos tienta para que volvamos a la falsa felicidad que ofrece el pecado.
Oremos por nuestra conversión, hacemos nuestra oración para que el Santo Espíritu de Dios venga a nosotros y nos afiance en el camino del evangelio.
La verdad nos mantiene vivos y salvo y nos aclara los sentidos, nos abre el corazón y nos dispone para el amor.
Adoremos la verdad que es el mismo Jesucristo y apreciamos su mensaje practicando todas sus enseñanzas.
Ahora para finalizar, con ayuda de las siguientes preguntas Analicemos nuestro corazón.
Doy gracias a que su por orar cada mañana por mi salud y bienestar ¿Trabajo para la unidad de todos los hijos de Dios y oro por la unidad de las familias?
Entendí que es pertenecer al mundo y que es pertenecerle a Dios, la verdad ha santificado mi vida y me ha llevado a Cristo, Oremos.
Dios nuestro, gracias porque la verdad de tu hijo nos ha significado nuestras almas, y nos ha permitido ver la mentira para desecharla damos gloria a ti padre por los dones que nos das por eso te suplicamos nos des el fuego de tu espíritu para con amor corresponder a toda tu bondad.
Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina contigo en unidad del espíritu santo y es Dios por los siglos de los siglos amen Que el Señor te bendiga abundantemente en este día en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Si esa reflexión te ha gustado, recuerda dar like, dejarnos tu intención en los comentarios y activar la campana de notificaciones para que todos los días recibas estos preciosos mensajes Te saluda tu hermano Daniel deseándote un día lleno de bendiciones.
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